
ASDRA fue parte de la III Jornada de Empleo para la inclusión y I Jornada de Responsabilidad Social Institucional.
Se trató de un espacio para intercambiar experiencias, escuchar a los expertos, capacitarnos y sensibilizarnos en temas de Empleo con Apoyo y Responsabilidad Social. El encuentro se realizó en la Sindicatura General de la Nación.
La Lic. Soledad Bugacoff, Responsable de Comunicaciones de ASDRA, expuso acerca de cómo nos referimos a las personas con discapacidad, como parte del panel Comunicación Inclusiva. Se refirió a las expresiones discriminatorias, las avaladas por el colectivo, y el necesario cambio de mirada para eliminar los estereotipos que vulneran derechos: «Si queremos saber cómo referirnos a una persona con discapacidad, como mencionarla, empecemos por usar su nombre. Si es pertinente para lo que estamos comunicando mencionar la discapacidad, podemos preguntarle a la persona qué opina. Lo acordado por personas del colectivo es PERSONAS CON DISCAPACIDAD. Ponemos en primer lugar a la persona. Es decir, que entendemos que se trata, como cualquier otra persona, de alguien único, que no queda definido por su discapacidad. Y por eso no es “chico Down”, “el sordo”, “un paralítico”, etcétera. Decimos que tiene una discapacidad porque no dejamos de reconocer que es una persona que debe atravesar barreras impuestas por el entorno.»
«Desde el modelo social de la discapacidad se entiende que el origen de la discapacidad está en las limitaciones de la sociedad porque está organizada de una manera que no asegura respuesta a las necesidades de esas personas. Además, desde este modelo se entiende que las personas con discapacidad pueden hacer el mismo aporte a la sociedad que cualquier otro individuo. Para eso es importante la inclusión y la aceptación de la diferencia, que los espacios se adapten a la diversidad de las personas. Este modelo quedó plasmado en la Convención Internacional sobre los derechos de las Personas con Discapacidad, formulada con la participación de los propios protagonistas», explicó.

Además, habló acerca de la emoción y la «estigmatización positiva» que con imágenes como diminutivos o ideas acerca de las personas con síndrome de Down como «angelitos» también acaban siendo discriminatorias. Por último, comentó que más allá de usar unas u otras palabras «Tenemos que dejar de lado las etiquetas que están sobre las personas con discapacidad, separar a la inclusión de lo solidario y desnaturalizar ideas que tenemos sobre lo normal para poder albergar la diversidad».