La educación es la herramienta de superación más importante que tiene una persona, por eso, cuando se niega a un niño ese derecho se le impide la posibilidad de desarrollarse y transformar el mundo con su hacer. Con esta convicción, como eje central, ASDRA realizó días atrás las Jornadas de Capacitación Virtual “Enseñar desde y para la diversidad” durante tres sesiones y con la participación de más de 400 actores de la comunidad educativa: directivos, docentes y profesionales de apoyo. Éstos eran de CABA y las provincias de Buenos Aires, Formosa, Catamarca, Jujuy, Salta, La Rioja, Chaco, Santiago del Estero, Tucumán, Misiones, San Juan, Mendoza, Entre Ríos, La Pampa, Córdoba, Santa Fe, Río Negro, Chubut y Santa Cruz; también hubo participantes de los siguientes países: Uruguay, Chile, Perú, México y Estados Unidos.
Estas Jornadas las diseñó el Equipo del Programa “Alumnos Ciudadanos”, ya que, con frecuencia, cuando visitan escuelas públicas y privadas para brindar charlas sobre valores e inclusión, se encuentran con que muchos docentes le manifiestan que carecen de herramientas y formación para incluir a alumnos con síndrome de Down, en particular, y con discapacidad, en general.
Las Jornadas ofrecieron los siguientes temas: el primer día, se reflexionó acerca de si la educación es accesible para todos los chicos. La sesión estuvo a cargo de las psicopedagogas Mariana Altamirano, quien puso énfasis en el derecho que tienen los alumnos con discapacidad a estudiar con igualdad de oportunidades y de participación, y Mariela Campi, quien dio ejemplos de cómo llevar a la práctica en el aula lo que establece la legislación vigente.
En tanto, en el segundo día, se abordó el método del Diseño Universal del Aprendizaje (DUA). Se trata de una herramienta fundamental, ya que invita a pensar desde el inicio en la diversidad y para planificar para todos los alumnos. La sesión contó con las participaciones de María Victoria Ayerra, psicóloga y psicopedagoga, y de Josefina Iribarne, psicopedagoga.
“Militar” el malestar
El último día contó con la participación de Silvana Corso, especialista en educación, y de la psicóloga Florencia Vásquez. Corso concientizó sobre el rol de los equipos directivos para la inclusión en las escuelas y los invitó a “militar” el malestar. Propuso asumir el desafío de hablar sobre aquello que molesta y alojar la duda en los actores educativos para abandonar la certeza de que la inclusión no se puede. Si nada interpela, dijo, difícilmente se produzcan cambios para la inclusión. Y Vázquez, por su lado, subrayó la importancia del proceso de sociabilización y de contar con los recursos necesarios para llevarlo a cabo, ya que a la escuela no solo se va a estudiar sino también a sociabilizar, compartir, tolerar la frustración, aprender las normas de convivencia y a desarrollar otras habilidades sociales con los pares.
¡ASDRA agradece a las profesionales que compartieron, de manera generosa, sus conocimientos! ¡También la participación de cada asistente! ¡Alentamos a poner en práctica lo aprendido para contar con más escuelas inclusivas!